[AlertaCalleCalle] Observaciones ciudadanas y jurídicas al proyecto Piscicultura Antilhue

Durante el proceso de calificación del proyecto que aún se encuentra activo en el Sistema de Evaluación Ambiental (SEIA), se recibieron 10 observaciones de organizaciones jurídicas y 23 de personas naturales.

Luego que 9 organizaciones el 16 de noviembre del 2017 presentaran cartas presentaran al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de la Región de Los Ríos con la necesidad de iniciar un proceso de participación ciudadana, se abrió un proceso de 20 días en el cual toda persona y organización pudo presentar sus consultas, preocupaciones, comentarios, a favor y en contra.

Del 13 de diciembre 2017 al 12 de enero 2018 diez organizaciones con personalidad jurídica y 23 personas naturales fueron las que expresaron sus preocupaciones y solicitudes en relación al proyecto de la Piscicultura Antilhue.

La Piscicultura Antilhue es un proyecto que inició el 2015 en la Región de Los Ríos, el  6 de diciembre de 2015 el SEIA recibió la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto “Piscicultura Antilhue”, cuyo representante legal es Gustavo Burgemeister Vester, oriundo de Temuco, pero que fue desistido por la empresa. Luego el 23 de marzo de 2017 ingresó al sistema pero no fue calificado y, el último proyecto, ingresó nuevamente el 20 de octubre de de 2017 y es el que actualmente está en proceso de Calificación ambiental y que mantiene en el alerta a las localidades cercanas al lugar donde se planifican las obras.

El proyecto Piscicultura Antilhue consiste en la construcción y operación de un centro de cultivo de especies salmonídeas, con una producción máxima de biomasa proyectada de 230 toneladas para el primer año de operación, 600 toneladas para el segundo año de operación y de 2.400 toneladas anuales a partir del tercer año de operación. El proceso de cultivo, considera desarrollar sólo las fases alevinaje y smoltificación.

Observaciones personas jurídicas

Las 10 organizaciones que estuvieron presente en el proceso de participación ciudadana fueron: la Junta de vecinos 16-R Pishuinco, Junta de Vecinos Nº 1R Antilhue, Cooperativa de Transporte Rural Los Lagos, Asociación para el desarrollo Turístico de la Comuna de Los Lagos, COSOC Máfil, Comité de Desarrollo y Adelanto Turístico, Junta de Vecinos N° 31 Arique, Junta de Vecinos Mulpún y Corporación de Desarrollo Integral de la comuna Los lagos.

Para la junta de vecinos de Antilhue, representada por Manuel Rodríguez, la observación realizada el 12 de enero de 2018 tiene relación con  el plan de Estrategia Regional, donde se ha considera que para las comunas deprimidas, el Turismo Sustentable es la llave para impulsarlas, en ese sentido expresó “ninguna empresa ajena a este rubro tendría cabida en desmedro de este polo de desarrollo”.

Otra de las organizaciones de Antilhue, el “Comité de Desarrollo y Adelanto Turístico” manifestó tres grandes preocupaciones 1) respecto al flujo de transporte y vías de trayecto del proyecto, 2) calidad de aire desde el tercer año de ejecución del proyecto, y 3) Respecto al impacto del valor del paisajístico y turístico del río Calle Calle, su rivera y zonas aledañas

Se consultó por el tiempo de los camiones en la ruta; las características como peso, modelo, dimensiones, que se indique el estado de la ruta, y duración con las condiciones con el desarrollo del proyecto; se solicitó un estudio que demuestre la compatibilidad del flujo vehicular turístico y el transporte vehicular de la piscicultura; indicar mediciones relativas a malos olores, durante las etapas criticas del manejo de residuos, mantención y limpieza de piscinas, retiro de lodos; se presentó que expliquen cómo se pretende compatibilizar el creciente desarrollo turístico de las zonas aledañas, principalmente el sector de Antilhue con el desarrollo de la industria salmonera.

También el comité pidió indicar las obras paisajísticas internas de la zona de operación que contribuyan a la armonía paisajística del sector, considerando que, en caso de utilizar el lugar como punto turístico, sea agradable a los visitantes; se pidió programas de vinculación turística con agrupaciones; y finalmente que den cuenta de experiencias exitosas de vinculación con empresas de piscicultura como las del proyecto.

Para Gustavo Burgemeister Vester, representante del proyecto Pisicultura Antilhue dice compartir las preocupaciones de los vecinos, “lo que más le importa a nuestros vecinos, al igual que nosotros son las externalidades que pueda acarrear el proyecto”, expresó.

Para la empresa las principales externalidades y preocupaciones de la población son los malos olores, contaminación del cauce, que el proyecto se contraponga a la actividad turística, como la pesca deportiva o tan fundamental como el uso del agua. En este aspecto, se sienten seguros por la experiencia de otros proyectos del mismo tipo realizados en la Araucanía y Los Lagos.

¿Si el proyecto no es aprobado por el SEIA?

Burgemeister, respondió con claridad, “seguiremos trabajando porfiadamente porque creemos que es un buen proyecto para la comunidad, la región y el país, en el cual habrá trabajo de buena calidad y oportunidades de desarrollo social, económico y además sustentable para el medio ambiente”.

Observaciones ciudadanas

En este aspecto, se hicieron notar profundas críticas a los estudios antropológicos del proyecto, se cuestionó la presentación de estudios del año 2015; la definición del trabajo etnográfico, ya que se realizó en dos días y no en todos los sectores correspondientes a la zona de influencia; se expresó que no hay beneficios en contratación de mano de obra permanente, en ingresos en la comuna por concepto de patentes y permisos municipales; preocupación por la contaminación de las aguas, los malos olores, el aumento de tránsito de camiones; el uso del agua para consumo humano, varias veces se cuestionó el aporte del proyecto al enfoque turístico del sector, entre otras preocupaciones se le dejaron por escrito y son parte del proceso.