Diversas reacciones despertó una entrevista publicada este martes por el diario La Segunda, donde la senadora por Los Ríos, María José Gatica, realizó fuertes declaraciones sobre la crisis que atraviesa la Universidad Austral de Chile.
“La única forma de que la Universidad Austral salga a flote es que deje las ideologías de izquierda”, fue el titular de dicha entrevista.
Más adelante, la parlamentaria por el distrito 24, precisó a qué se refería con dichas palabras.
“Respeto que las autoridades tengan una tendencia política, pero una cosa es lo personal y otra lo institucional”, indica en la entrevista.
Por último, Gatica critica el plan de recuperación de la casa de estudios con sede en Valdivia.
“Digamos las cosas como son: la Universidad Austral está al borde de la quiebra, el gobierno le dio un salvavidas aprobándole un plan de recuperación malito y la única forma de que salga a flote es que la rectoría deje de lado las ideologías de izquierda en las que ha caído y comience a gestionarse como una verdadera universidad”, agrega la parlamentaria.
Luego de esto, el consejero regional Matías Fernández Hartwig, reaccionó de manera crítica a los dichos vertidos por la senadora de Renovación Nacional.
“Esta entrevista es un insulto a la Universidad Austral, la comunidad universitaria y a la pluralidad del pensamiento. La senadora debe proponer medidas concretas para la recuperación de la institución, en lugar de alimentar fantasías políticas”, fue la enfática interpretación del consejero.
En conversación con Diario de Valdivia, Fernández Hartwig agrega que la ofensa no es solo para estudiantes y docentes, sino que también a funcionarios, funcionarias, administrativos, exestudiantes y comunidades que interactúan con la universidad. “Reduce la problemática a una fantasía política que es que la izquierda supuestamente maneja la universidad, pero además busca aprovechar esta crisis universitaria para polarizar una discusión que tiene su origen en un problema mucho más profundo”, agrega.
Y añade que además ofende la libertad y pluralidad de pensamiento que existe en las universidades, al intentar instalar la idea de que la institución estaría formando o siendo un reducto de un sector político cuando la realidad es completamente distinta.
“Ahora, si a la senadora le molesta la diversidad y democracia del pensamiento que existen en las universidades ese es otro tema, pero creo que se perdió la oportunidad importante de plantear soluciones de fondo, como la interacción pública por ejemplo para esta crisis o hablar de la responsabilidad del directorio de esta universidad entre otros diagnósticos y soluciones”, cierra el consejero.
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