"Aislar a Los Lagos de la Ruta 5 Sur es enviar a la comunidad al sacrificio"

Columna de opinión de la Mesa de Trabajo No al Bypass.

El pueblo de Los Lagos, enclavado en el centro de la Región de Los Ríos, ha sido mudo testigo de la transformación de un sistema ferroviario de transporte a un sistema de carretera, como lo es la Ruta Panamericana 5 Sur. Con la agonía del tren a mediados de la década del 80, se construye el Puente San Pedro y Los Lagos es incorporado a la Ruta 5, que atraviesa la comuna, convirtiéndose en el nuevo motor del desarrollo. Muchos vieron con buenos ojos esta oportunidad para emprender y generar riqueza, a partir de ese momento.

En un pueblo eminentemente rural, además de la agricultura, la silvicultura y ganadería, emergen nuevas oportunidades económicas, como los rubros de la construcción y servicios, los que han prosperado en la comuna durante los últimos 40 años. Esta ubicación estratégica ha dinamizado la economía del lugar. Nadie puede desconocer que, desde 1985, la comuna ha ido creciendo junto a la Carretera Panamericana Sur, la que se ha convertido en el corazón de su economía y en parte de su identidad local. 

¿Qué laguino se puede imaginar a Los Lagos sin su carretera? Nadie, por cierto. Sólo alguien que no es de Los Lagos, como lo puede ser un planificador del Ministerio de Obras Públicas (MOP) o algún político con mucho poder. Sin embargo, después de 40 años de progreso, ahora nos quieren quitar la carreta y construir un Bypass que tendrá una extensión de casi 16 kilómetros y contempla un viaducto de 1,6 kilómetros de largo, que estará emplazado sobre los ríos San Pedro y Quinchilca, a 40 metros de altura, en la confluencia de ambos ríos.

Si ya pasa la carretera 5 Sur ¿Cuál es el sentido de construir otra ruta? Perfectamente se puede mejorar la que ya existe o como dicen algunos vecinos “también se puede hacer un túnel o una vía elevada, que pase por el actual trazado, y el impacto sería mucho menor. Aislar a Los Lagos de esta forma y quitarle su corazón económico es definitivamente enviar a toda la comunidad al sacrificio. Sin duda, es un proyecto que debe reconsiderarse, aunque ya esté licitado.