Tras 11 días de búsqueda por la desaparición del botero Carlos Fuentes Miño, la familia confirmó que este fín de semana aparecieron algunas prendas de ropa que corresponderían a las que usaba el día que cayó al río San Pedro, desde su embarcación.
Según lo expresado por su hija Carolina Fuentes Railef, el sábado entre las aguas del río San Pedro habría aparecido una bota y un polerón, mientras que este domingo encontraron una polera, situación que aferra a la familia y los voluntarios a la posibilidad cierta que aparezca cuanto antes.
Carolina explicó que "Lo único que esperan es tener novedades para que su cuerpo pueda descansar dignamente. Sabemos que su alma es de agua pero su cuerpo debe quedar en tierra, para tenerlo y poder visitarlo para dejarle una flor" dijo.
Durante esta jornada se sigue la búsqueda con apoyo de grupos Gersa de Los Lagos y Osorno, boteros y familiares, quienes continúan desplegados extremando sus esfuerzos más allá de la poca fortuna que ha acompañado las labores.
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